Entre los fiordos de Aysen

Este es el paisaje que he logrado conocer acá en el sur, maravilloso, donde también se hace patria, trabajo muy sacrificado por la distancia y esos crudos inviernos que deben soportar los trabajadores, pero si ellos aman su trabajo, entregan todo por el y por Chile, esta tierra bendita que Dios nos ha legado, y que con mucho esfuerzo y estudios debemos protegerla, este es Chile, hermoso, orgulloso de su raza y de su gente, no le demos la espalda.

Cruce con un Barco

De vuelta de El Pino, nos cruzamos con un barco, lo cual fué muy hermoso para uno que nos está acostumbrado a este tipo de eventos y menos viajar por horas en Panga(lanchas) desde una Isla a otra, es una nueva experiencia acumulada, además de lo hermoso que es este paisaje sureño acá en el Archipiélago de las Guaitecas, al sur de isla de Chiloé.

Archipiélago Las Guaitecas

Acá estoy en un barco que transporta salmones vivos, llevaba esta vez 90 Toneladas, como ven es una cifra impresionante, y además está el trabajo que realizan chilenos como uds. en estas tierras australes, mucho sacrificio y trabajo, pero pero todo eso se suaviza con el amor a Chile que le tienen estas personas, la verdad es que impresionan las condiciones duras en que se debe trabajar, pero es un trabajo muy hermoso el que realizan en Melinka, en el Archipiélago de las Guaitecas, más al sur de Chiloé.

LAS VACACIONES

Esta imagen nos trae a la memoria un paraiso para descansar en nuestras vacaciones, por la tranquilidad que emana de este paisaje traiguenino tomado desde el sector del El Castillo

Catalina Villarroel y su rey Feo reciben de manos del Sr. Luis Alvarez Valenzuela, junto a la Directora Iris N. Fuentes F. por ocupar el Segundo Lugar de la candidatura a reina de la Fiesta de la Primavera 2007. Felicitaciones a estos Jóvenes representantes de la Escuela "Emilia Romagna".

GALA CONJUNTO CHUMAY

Una panorámica del conjunto en plena actuación, en su primera parte, donde nos deleitaron con los bailes y danzas de los salones elegantes de antaño, allá por el año 1860, en pleno periodo postcolonial donde se celebraban este tipo de fiestas o Saraos en la Aristocracia chilena.

Un balsamo para el Alma

Que se puede decir sin ofender a alguien, pero la paz que entrega esta imagen es infinita, hace bien para la tranquilidad del alma y del espíritu, los que somos cristianos nos hace bien a veces acordarnos de Dios y su Santa Madre, una peregrinación por las calles de Traiguén, en honor de ella.